martes, 13 de mayo de 2014

 Selma, el pequeño pueblo olvidado de l´Alt Camp


Selma es un pequeño pueblo abandonado situado al término municipal de Aiguamúrcia en la comarca de l´ Alt Camp, a 743 metros de altitud y presidido por los escombros del Castillo de Selma, en una zona montañosa que hace de frontera natural entre el Campo de Tarragona y el Penedès. Sus vestigios históricos son milenarios. Hay constancia de su existencia desde el año 977 (Sancta Maria de Celma), así como que desde el año 1140 hasta el 1377 estuvo administrado por la Orden del Templo (templaris), y que a lo largo de su historia sufriera innumerables saqueos e intrusiones. Se calcula que a mediados del siglo XIV vivía una población de un 250 habitantes, posiblemente el momento de máximo esplendor de la población. Hay que decir que si bien existía un núcleo habitado con una cincuentena de casas, el municipio era muy extenso y albergaba numerosas masías diseminadas por todo el territorio. En época templaria hubo dos iglesias, la de Santa Maria de la Roca y la de Sant Cristóbal. A mediados del siglo pasado se fue despoblando con la marcha de todos sus habitantes hacia El Pla de Manlleu, mucho mejor comunicado y con más servicios. En la actualidad sólo quedan de pie los escombros de unas viejas casas que formaban el núcleo poblacional, y el campanario y restos de la iglesia de San Cristóbal.
Desde una planicie se puede observar a simple vista el campanario fantasmagórico de otro pueblo abandonado, Marmellar. 
Espero que os guste este recorrido fotográfico por las misteriosas calles de este pueblo abandonado a su suerte.


Las vides nos acompañaran durante todo el camino.


Caminos polvorientos que nos llevan hasta la subida de acceso a Selma.



Los colores de la primavera en L'Alt Camp


Subida a las estribaciones de Selma.


Nuestra mascota Kenai, preparada para la ascensión.


El color verde lleno de vida con el sol de mayo.


Seguimos por el camino.


El camino nos otorga vistas como esta.


Cruce de caminos hacía Selma.


Las ruinas ya se dejan ver en el horizonte.




 Recorrer los campos de vid sin pisar los cultivos. 

Nos acercamos a Selma.


La torre de la iglesia de San Cristobal nos espera.


 La vegetación recupera lo que es suyo.


Restos de lo que fue la calle principal del pueblo.


Ya nadie mira por estas ventanas, ... o quizás sí.


Vistas de los campos de Selma.











Diferentes instantáneas de una de las casas principales.





Juegos de perspectivas con la torre de la iglesia.



Paredes que desafían la gravedad.





La torre sigue desafiando sus años de abandono.



¿Hornos o tumbas? ... a los pies de la iglesia.






El interior de la torre, un lugar misterioso donde la sugestión no debe dominarte.


Una cruz abandonada en la iglesia, o un intento de volver a sacralizarla.






































Nos despedimos de Selma y sus calles hasta una nueva ocasión.

2 comentarios:

  1. Ideal para pasar un muy buen día agradable de senderismo y abandonos!

    Buen reportaje! ;

    Gracias por revivir en modo de reportaje estos pequeños pueblecitos olvidados

    Un saludo!!

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Muchas gracias por tus comentarios.Muy amable.Un saludo.